miércoles, 24 de febrero de 2010

Elaboración de un proyecto de investigación

Proyecto de investigación.
Gestión y exposición de trabajos académicos.

CRONOGRAMA
- Días 1 al 5: captación de la información.
-
- Días 6 al 10: lecturas básicas previas.
-
- Días 10 al 40: lecturas de capítulos seleccionados.
-
- Días 40 al 43: creación del marco teórico.
-
- Día 43: realización del envío de cuestionario del método delphi.
-
- Días 43 al 50: Análisis de escenas metaficcionales de tres metrajes.
-
- Días 50 al 57: Análisis de escenas metaficcionales de tres metrajes.
-
- Días 57 al 64: Análisis de escenas metaficcionales de tres metrajes.
-
- Días 64 al 71: Análisis de escenas metaficcionales de tres metrajes.
-
- Días 71 al 78: Análisis de escenas metaficcionales de tres metrajes.
-
- Días 78 al 85: Análisis de escenas metaficcionales de tres metrajes.
-
- Días 85 al 92: Análisis de escenas metaficcionales de tres metrajes.
-
- Días 92 al 100: recopilación completa y análisis de los datos obtenidos en el método delphi y elaboración de conclusiones.
-
- Días 100 al 115: redacción del informe.

miércoles, 2 de diciembre de 2009

Sobre el concepto creatividad

A menudo he escuchado una frase: “pensar es crear”, sin embargo, volviéndome a mis pensamientos, me pregunto si estamos continuamente creando y, lo más importante, si la creatividad es la facultad de crear (según la RAE) y estamos pensando, por lo tanto creando, ¿siempre que pensamos estamos siendo creativos? Algunos pueden pensar que sí, que se crean pensamientos, se crean imágenes mentales o imágenes de recuerdos, por lo tanto, se crean razonamientos y en parte se está creando. Pero aquí mismo se tacha la idea continua del ser humano como ser linealmente creativo, ya que, si preguntas a alguien que piense en su madre si está siendo creativo, te dirá que no casi con toda seguridad.
Tras esto, podemos sacar una segunda conclusión, que pensar no siempre es crear, ya que, si por ejemplo pienso en que ninguno de mis amigos pone tilde a Raúl o Álex, hasta que se lo digo no se dan cuenta, entonces es cuando lo piensan y recapacitan sobre su “por qué”, por esto podemos decir que pensar es recrear, recrear pensamientos con la base fundamentada en el conocimiento y el recuerdo. Aunque no siempre, ya que encontramos veces que se crea auténticamente, innovando con unas ideas determinadas, por eso mismo no siempre que pensamos estamos creando, porque no estamos innovando continuamente.
Introduciéndonos en el término crear, sale la famosa frase de “producir algo de la nada”, sin embargo, ¿hay algo que venga de la nada? Se supone que producir algo de la nada es imposible, que lo nuevo es una conexión de ideas que todavía no se habían establecido en conjunto.
Aparte de esto, hay que diferenciar entre dos aspectos muy importantes del pensamiento, el pensamiento creador y el pensamiento creativo. Crear no significa ser creativo, es ser creador, ya que, de acuerdo con Frank Barron, lo creativo implica originalidad. Podemos observar que quien trabaja haciendo un coche, a mano, por ejemplo, un Cadillac de hace setenta años sigue un método de creación, es decir lo ha creado, pero no lo ha creado realmente ni ha sido creativo, sin embargo, puede ser creativo añadiendo a la obra algunos detalles propios e innovando en estos, pero para esto han de considerarse dichos detalles dentro de un marco de belleza. No se puede ser creativo estropeando la obra, así, a este marco de belleza lo denominaremos arte, dentro de la subjetividad que conlleva.
Decimos pues, la creatividad está completamente ligada al arte y hemos de expresar que el arte lo tomamos no como un concepto global, sino como un concepto individual o economizado, además, el arte se da cuando el perceptor descubre y reflexiona sobre el objeto considerado como tal.
Visto esto, nos preguntamos cómo se crea. Es algo muy sencillo, hemos de encontrar una conexión de ideas que no se han relacionado anteriormente, al menos no de la manera que se desea hacer. Pongamos un ejemplo: un niño, la vida, obstáculos, un camino, la muerte, la conversión, la transformación, la superación, el final, un árbol y diversos sentimientos que se nos exponen en nuestros razonamientos y que, para nada son inmiscibles a nuestro relato. Con estos apartados podemos crear una historia de un niño que es un muerto viviente, que va descubriendo cosas y superando obstáculos a lo largo de un camino y que finalmente acaba convirtiéndose en árbol. Hasta este punto hemos alcanzado el pensamiento creador, una conjunción de ideas que difícilmente haya dado alguien anterior a mí, pero ¿cómo hacerlo creativo? Antes hemos hablado del arte, lo creativo se ve como artístico a menudo, incluso a veces podrían ser casi sinónimos, en conclusión, lo que sea creativo ha de llevar inmiscuido en su propia existencia el arte, planteando arte desde la percepción del objeto y desde la persona que lo tome por arte, por lo tanto nuestra historia ha de ser innovadora y artística para ser creativa, así tomaremos la creatividad de la siguiente forma: “Capacidad o facultad del pensamiento para crear, siendo a su vez síntesis del crear y del arte”.
Pero también podríamos lograr un resultado a través de la consecución de los fines que esperamos conseguir con dicho objeto. Un ejemplo: hemos realizado un anuncio que pretende aumentar las ventas un 30% y las ha aumentado aún más. Muchos teóricos exponen que para que dicho objeto o realización, en este caso, sea creativo, ha de dar unos resultados “buenos” al proyecto del que deriva. Pero otros exponen que a veces no se da resultado por un exceso de creatividad. Algo que únicamente se disfruta en publicidad pero que no aporta el beneficio esperado es un buen ejemplo. Así se puede continuar con el anterior concepto de creatividad sin que se vea alterado por resultados.

GUILLÉN LÓPEZ, FRANCISCO ALEJANDRO
ARTE, CREATIVIDAD Y COMUNICACIÓN.
CIENCIAS DE LA COMUNICACIÓN